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Reportaje

La seguridad debe alejarse de la política

El crimen organizado en México va en franco aumento. Para luchar contra la delincuencia de manera frontal, se necesita una institución que opere a nivel nacional y retomar los procesos tecnológicos de la Plataforma México, la red informática de seguridad pública creada durante la administración de Felipe Calderón, para interconectar todas las fuerzas policiales del país mediante herramientas tecnológicas y de inteligencia: Alejandro Desfassiaux.

Por: Ulises Navarro Swipe

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 Alejandro Desfassiaux

Presidente de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial

| Los números no mienten

De acuerdo con el Índice Global de Crimen Organizado 2021, de la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional (organización independiente de la sociedad civil, con sede en Ginebra, Suiza), el gobierno mexicano carece de una estrategia de seguridad coherente, y los intentos de abordar el crimen organizado y la corrupción se consideran altamente politizados o como esfuerzos para avergonzar a gobiernos anteriores.

El índice también señala que México es la cuarta nación más afectada por la criminalidad, lo cual ilustra las deficiencias y debilidades del sistema de justicia penal y anticorrupción, mientras que los niveles de resistencia del crimen organizado aumentan.

El Índice Global de Crimen Organizado es un análisis que examina la situación de criminalidad en 193 países integrantes de la ONU.

Alejandro Desfassiaux, presidente de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial, fundador del Consejo Nacional de Seguridad Privada (CNSP) y especialista en este ramo, nos cuenta la situación del país en materia de seguridad y esboza una estrategia que el gobierno debería de seguir para impedir que el crimen organizado siga reinando.

AN Alejandro, ¿cuál es la situación de nuestro país en materia de seguridad? Los datos del Índice Global de Crimen Organizado 2021 son alarmantes. 

Efectivamente, la situación del país es preocupante. De acuerdo con este índice, México es el país con el mayor mercado criminal del mundo. En una escala del 1 al 10, en la cual 1 es menos violento y 10 es más violento, la calificación de México es 8.

De acuerdo con los reportes, en México se cometen más homicidios en tres días que durante un año en España. La tasa de homicidios en el país es de 29 homicidios por cada 100,000 habitantes, la cual es muy alta.

El año pasado, el país cerró con un homicidio cometido cada 14 minutos, en promedio. Esta cifra es mucho mayor que el número de homicidios ocurridos durante el sexenio del expresidente Felipe Calderón, considerado como el más violento de México, a pesar de que las fuerza federales y estatales no están llevando a cabo enfrentamientos.

Con Felipe Calderón se ordenaron enfrentamientos frontales contra el crimen organizado. En este sexenio no ha habido enfrentamientos; sin embargo, las células criminales operan con total impunidad, aunque su operación ha sido menos vistosa. Por ejemplo, hay pocas noticias de cabezas y cuerpos colgados, pero al parecer esto ha sido parte de un arreglo. Lo cierto es que la actividad del crimen organizado va en aumento, sobre todo en algunos delitos, como el derecho de piso y las extorsiones. Este problema ha llegado a tal grado, que los agricultores de aguacate han tenido que solicitar ayuda a las autoridades portando fusiles AR-15.

México es el país con el mayor mercado criminal del mundo.

AN ¿Qué ha hecho la autoridad ante estas situaciones? 

En zonas de conflicto donde el crimen empieza a desbordarse –con delitos como derecho de piso, extorsiones o amenazas, y secuestros–, envía a grandes partidas de la Guardia Nacional. A las dos semanas, la zona está pacificada, pero cuando la Guardia Nacional se retira, los criminales regresan y la situación no cambia.

En la Ciudad de México, las alcaldías que acumulan el mayor índice delictivo son Tláhuac, Cuauhtémoc e Iztapalapa. En el país, Colima es el estado con la mayor tasa de delitos. Las entidades más conflictivas son Colima, Quintana Roo, Baja California, CDMX y Aguascalientes. Los estados con mayor impacto de feminicidios son Sinaloa, Quintana Roo, Sonora, Morelos y Chihuahua.

Hoy en día la Guardia Nacional está compuesta por 90,000 elementos, un número bajo comparado con el medio millón de policías estatales y municipales que actúan en complicidad con el crimen organizado. Además, 200,000 taxistas ayudan al tráfico de drogas y sirven de vigías o halcones. En muchos estados, los gobernadores no enfrentan el crimen organizado porque no quieren problemas, mientras que otros les permiten operar.

Otro dato que demuestra la situación de inseguridad que reina en México es la percepción de seguridad por parte de la gente. El 64% de la población se siente insegura, de acuerdo con el INEGI.

AN ¿Qué ocurrirá durante el periodo que le queda a la actual administración federal?

Mi pronóstico es que todos estos delitos seguirán creciendo y entonces culparán al Ejército de la falta de resultados, lo cual sería gravísimo, porque el Ejército ha hecho un gran trabajo con la Guardia Nacional.

Siendo propositivo, yo volvería a insistir en que todas las policías estatales y municipales pasen a formar parte de la Guardia Nacional, bajo un estricto proceso de selección. Pero esto es complicado, porque los gobernadores no quieren perder control; no quieren perder su “cuota de poder”.

Creo que no habrá una solución a este problema si no se tiene el control de todas las policías y servidores de seguridad. Debería existir un protocolo de orden, mando y comando que operara a nivel nacional para luchar contra la delincuencia de manera frontal, y que se retomaran los procesos tecnológicos de la Plataforma México, que fue creada durante la administración de Felipe Calderón y que fue desmantelada por el gobierno de Enrique Peña Nieto. [La Plataforma México fue una red informática de seguridad pública mediante la cual se interconectaba a las fuerzas policiales del país, como parte de su ofensiva a la delincuencia. Funcionaba como una herramienta de inteligencia y coordinación policial].

Tal parece que seguimos manteniendo el mismo estilo desde hace décadas: cada seis años que entra una nueva administración, el presidente en turno deshace todo el trabajo anterior para empezar de cero.

Es importante que la seguridad nacional se despolitice; que la política no tenga nada que ver con la seguridad y que sea la institución encargada de la seguridad sea transexenal y no tenga que crearse una institución nueva cada sexenio. También propongo que los miembros de la Guardia Nacional sigan una preparación similar a la de los miembros del Ejército.

AN ¿Qué recomendaciones les darías a los empresarios para protegerse de la delincuencia?

La recomendación número uno que le hacemos a los empresarios es que no caigan en la extorsión o el chantaje, porque nunca saldrán de ahí. En segundo lugar, que establezcan protocolos de reclutamiento y selección con verificación de antecedentes. Es decir, si van a instalar una planta o un área productiva, que antes investiguen al personal que van a contratar, para evitar ser víctimas de un daño por parte del personal.

En tercer lugar, que establezcan protocolos de costo-beneficio con su seguridad; esto significa que analicen si el costo de la vigilancia que contratan tiene un retorno de inversión al ayudarles a reducir pérdidas. Si no tienen ese dato claro, quiere decir que además de sus pérdidas estarán pagando un costo en seguridad.

Otro punto importante es establecer políticas claras para sus recursos humanos, como cero tolerancias a cualquier tipo de actividad delictiva. Así, quedará claro que en la empresa no se permite ningún acto delictivo y se actuará en consecuencia.

Y mi recomendación para las autoridades es que se establezcan procesos y protocolos que permitan tener un cuerpo nacional de seguridad de largo plazo, transexenal, y alejado de cualquier tema político; que ese cuerpo de seguridad nacional sea una institución de crecimiento y de carrera, y de largo plazo. AN

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