En busca de la magia del universo mexicano
El viaje del héroe, como lo planteó Joseph Campbell, es un recorrido que parece exterior, pero en realidad es una transformación del reino interior. ¿Somos los mismos? ¿Valoramos lo mismo? ¿Miramos igual? Esta pandemia nos ha traído muchos aprendizajes, miedos, retos, fortunas y hallazgos, como lo han hecho antes catástrofes históricas.
Y así como hemos salido adelante gracias a la unión, a la solidaridad y al sentido de comunidad, ahora nos toca ir, poco a poco, sorteando esta nueva normalidad, que nos invita a regresar intentando ser mejores cada día.
Ahora nos toca el turno de ser protagonistas y los héroes en nuestros viajes: ya sea los anfitriones que recibirán, los viajeros que explorarán y apoyarán el turismo local, los promotores que están mostrando las fortalezas, los campesinos que están manteniendo el abastecimiento… Todos, ocupemos el puesto que ocupemos en esa cadena de valor, estamos ávidos de mostrar de lo que estamos hechos: de hospitalidad, de héroes-herederos-cuidadores de la riqueza patrimonial y cultural que hace de nuestra tierra un lugar único, imperfecto e irrepetible.
Marcela González fue en busca de los fenómenos astrológicos y encontró, ni más ni menos, que una tormenta y luego el arcoíris y una Vía láctea en un escenario que poco asociamos con México: un desierto de yeso, las Dunas de Yeso en Cuatro Ciénegas, Coahuila. Es nuestra portada y, de manera breve, nos cuenta cómo fue salir por carretera en plena pandemia para acampar a las orillas de una poza donde habitan estromatolitos y tortugas del desierto.
Héctor Quintanar nos deleitó con una retrospectiva de las máscaras de Veracruz: un ensayo de fotografía documental que ha realizado a lo largo de 2019 y 2020 para dejarnos instantáneas estremecedoras que sintetizan tradición, alegría y candor veracruzano.
Algunas familias quizá están valorando ir a lugares no tan concurridos: para ellos Jimena Acevedo propone ir a un rincón nayarita, un pueblo pesquero al que se llega vía Puerto Vallarta y que cumple con varios requisitos de esta nueva normalidad: poca gente, playa limpia y posibilidad de ser un viajero responsable cumpliendo las medidas de autocuidado: cubrebocas, lavado de mano, estornudo de cortesía y sana distancia, por mencionar las elementales.
Si nuestra confianza reside más en los Sellos de Viaje Seguro, te proponemos algunos spas en Acapulco en hoteles que siguen estrictas acciones de limpieza y salud, así como un recorrido por los atractivos de Cozumel, cuyos protocolos en ambos casos han sido aprobados por la Secretaría de Salud.
Sobre pueblos te traemos un artículo de tres localidades mayas en Yucatán y haciendas en Campeche, dos historias de Arturo Torres Landa, quien da cuenta de las vidas de pescadores y piratas, que en un primer y segundo caso, respectivamente, son el motor de experiencias de mucho valor para comenzar con el pie derecho una nueva normalidad más justa, humanitaria y de apoyo a las comunidades más auténticas del país.
Y ya poniéndonos en el mood patriótico te dejamos una selección de pozoles atrevidos, otra de cervecerías en Ensenada y el resultado de la pesquisa por el sabor originario del chile en nogada en Calpan, Puebla. Y en ese viaje, manos campesinas, promotores del buen sazón y un antojo de alta alcurnia retratan que un pretexto simple y de temporada se puede convertir en una aventura en la que todos somos cómplices y de la que podemos participar si consumimos local, viajamos local, nos informamos y nos volvemos viajeros responsables y respondemos como mexicanos al grito de amor y solidaridad. Que retiemble en su centro la tierra, al sonoro rugir del amor.