Vale más trote que canse, que paso que dure
Desde mi punto de vista, en el tema de aplicación de vacunas contra la enfermedad de COVID-19 es mejor apresurarse que ir despacio y poco a poco. Como ejemplo están Israel, que está a punto de inmunizar al 100% de su población (poco más de 9 millones de personas), y Estados Unidos, con 330 millones de habitantes, que pronto habrá vacunado al 30% de su población (99 millones).
México, a ritmo de “un pasito pa’lante y pasito pa’tras”, está lejísimos de tan maravillosos resultados. La buena noticia es que la llegada de vacunas a territorio nacional ya se está volviendo algo cotidiano.
Y es que el valor de esos mililitros esperanzadores inyectados en el brazo comenzó a transformar el pensamiento humano y esto empieza a reflejarse en un sinfín de negocios. Los cambios positivos no serán de la noche a la mañana ni extensivos a todas las industrias, pero ya se ve una luz de esperanza.
La comercialización de automóviles nuevos, por ejemplo, se está transformando paulatinamente a raíz de la pandemia y ya no volverá a ser la misma. En entrevista exclusiva, Juan Antonio Hernández, presidente de Grupo Autofin, quien cuenta con más de 50 años de experiencia en la venta de automóviles a través de agencias y posee, entre muchos negocios, 50 distribuidoras de vehículos de todas las marcas, dice que las salas de exhibición serán de 100 metros cuadrados como máximo, y la venta en línea dominará la forma de comprar un auto (vale la pena señalar que Grupo Autofin vendía en promedio 100,000 unidades anuales a través de sus agencias hasta antes de la COVID-19).
¡Y vaya que este directivo que acostumbra reinvertir hasta el 95% de sus utilidades en nuevos negocios tiene razón! Basta observar cómo han evolucionado el mercado y muchísimas industrias hacia la comercialización digital; incluso los procesos bancarios tradicionales que se tenían en México han sido modificados para llevarlos al mundo digital.
Si bien esta tendencia trajo consigo beneficios y eficiencias para los consumidores, también ha provocado un aumento notable en el robo de identidad de las personas. Para resguardar tu información personal, en esta edición encontrarás 10 consejos para protegerte.
Hablando de banca resulta imposible no abordar este sector en el mes tradicional de la Convención Bancaria. Aunque, a diferencia de las anteriores, esta edición –la número 84– será semipresencial: presencia física muy limitada en el patio del Club de Banqueros y la gran mayoría de las actividades a través de una plataforma digital; así lo informó recientemente el presidente saliente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Luis Niño de Rivera.
Adicional al contenido de fondo sobre la banca en México te presentamos los comentarios de Luz Adriana Ramírez, directora general de VISA México, y de Gustavo Méndez, socio líder de Servicios Financieros en Deloitte Spanish Latin America. Méndez sostiene que el sistema financiero mexicano está obligado a ofrecer servicios digitales, simples, justos, de menor costo, con mejores tasas y a la medida de cada cliente para así reactivar los créditos y la economía.
En general, la banca mexicana está sólida. Las prácticas internacionales y la regulación derivadas de la crisis de 2008 han ayudado a mejorar tanto la liquidez como la capitalización de los bancos, incluso con la pandemia. Sin embargo, en términos del negocio, 30 de los 50 bancos que operan en el país tienen una rentabilidad por debajo del 6% de su capital, mientras que las grandes instituciones siguen teniendo rendimientos superiores al 13%, gracias a su capacidad digital, sus economías de escala y su eficiencia.