Diamantes fluorescentes, todo lo que debes saber
Aquí, los detalles de por qué este tipo de diamantes es tan especial.
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La fluorescencia en los diamantes es una característica que sólo tienen entre el 25 y 30% de estos en el mundo. Los hace emitir un brillo azulado cuando se someten a luz ultravioleta. Es decir, este efecto ocurrirá cuando son expuestos a una “luz negra”, así que no te preocupes, no será visible al ojo humano.
¿Por qué sucede esto? Los diamantes presentan este factor gracias a rastros de boro durante el proceso de cristalización. Sin embargo esta característica no es buena ni mala, simplemente es algo con lo que cuentan algunos.
Es como una lotería, por ejemplo, si tienes una churumbela de 11, lo más probable es que el 25% de los diamantes de la misma, es decir, aproximadamente 2, presenten fluorescencia.
Según los expertos de DÍDIAMANT, la fluorescencia no es algo que añada o reste valor a tu diamante. Sin embargo, antes se prefería que no tuvieran esta característica, pero en la actualidad, en muchos casos, se considera como un extra.
Este factor puede ayudar a mejorar la percepción del color de los diamantes de grado H – K. Los que se incluyen en esta categoría por lo general tienen un matiz amarillo tenue que, cuando se combina con una fluorescencia media o azul fuerte, los hace lucir más blancos.
En casos raros, los altos niveles de fluorescencia pueden hacer que las piedras parezcan blanquecinas o brumosas, aunque en su mayor parte, no afecta en la belleza o el brillo. Los diamantes no son los únicos que pueden presentar este fenómeno, también sucede en piedras como los zafiros y rubíes, por citar dos ejemplos.
Un tip: Si quieres saber si tu diamante cuenta con esta característica única, puedes revisar en tu certificado de autenticidad. Ahí debería venir si tiene o no, qué tan intensa y de qué color es la fluorescencia.